Nuevo domingo, nueva ronda y las fechas donde se decidirán los premios naranja y limón siguen acercándose. Tras dos tercios de la competición devorados, los equipos empiezan a sacar la calculadora y a hacer cuentas. No queda mucho donde sumar y cualquier resbalón puede significar el adiós y/o cualquier sorpresón o victoria la salvación.
Ayer jugábamos en Girona contra el Santa Eugènia. Prácticamente llegábamos todo el equipo a la vez, a pesar de salir de orígenes diferentes y del "tom tom" (esta vez respondió a la perfección, seguramente por las amenazas de usarlo para reciclaje). Local de juego fabuloso, a pesar del calor que hacía dentro (para mi gusto). Al igual que nosotros, el Santa Eugènia presentaba una baja en su equipo titular. Cierto es que sacábamos elo en todos los tableros menos en el noveno, pero las diferencias eran insignificantes, y como ya presagiábamos, iba a ser un match muy igualado.
El primero en acabar fue Luis Sánchez sobre las 11 de la mañana al finalizar en tablas contra el MF Josep M. Sorroche. Ofreció, eso sí, una novedad en la creación del movimiento "toggi" desarrollando una torre por a6 en defensa de un caballo que cuanto menos fue original porque salidas la torre, no es que tuviera muchas. A las 11:45 firmó otras tablas Miquel Fernández-Díaz en una posición que, tal vez, hubiera podido dar otras perspectivas; pero eran de difícil profundidad de cálculo. 15 minutos más tarde, Eric Sánchez también acabó en tablas y ni pasados 5 minutos más las firmó Pablo Castillo. Francisco Núñez también finalizó en tablas a las 12:25. El marcador más igualado que nunca, reflejando un empate a 2,5. Daba (o ¿era?) la sensación de que íbamos acabando y dejando la responsabilidad a los primeros tableros.
Llegando al umbral de las 13:00 saltó el primer punto entero de nuestra parte con la victoria de Ricard Llerins, que supo rematar muy bien una posición compleja. Ese punto daba esperanzas de alcanzar un resultado positivo, aunque las posiciones restantes tampoco expresaban con claridad eso. De hecho poco después de acabar Ricard, tanto Erik Martínez como Óscar Ruiz tambien firmaron tablas (!!!y ya iban siete tablas en el match¡¡¡) y dejaban el marcador en 4,5 a 3,5 a nuestro favor.
Quedaban dos partidas inferiores, pero que fueron dando vuelcos. David Vivancos remontó una posición tras errores de su rival y pasó de estar mal a estar ganando en un final de damas. Pero la presión del tiempo le hizo perder primero dos peones que le complicaron mucho las opciones de ganar y después dejarse un mate que su contrincante se encontró sin más cuando David tenía el peón en c7 para coronar. También una falta de información de como iba el match (culpa del resto del equipo) le hizo arriesgar más de la cuenta en una posición que las tablas, si quería, las hacia con la gorra en cualquier momento. Todo se junto para mal de él y del equipo. Una desgracia que debe superar porque son cosas que pasan y en la que el equipo le arropa sin concesiones. !!Ánimo David¡¡.
Esa derrota final inesperada, unida a las tablas que finalmente arrancó José Aranda significaron el empate a 5 final en un match muy tablífero. Cierto es que pudimos ganar y de hecho a 10 minutos de acabar todo el match, parecía que ganábamos sin problemas; pero también es cierto que 15 minutos antes de esa dolorosa derrota estábamos en inferioridad (que no perdidos) y alcanzar el 5 a 5 parecía una quimera. Así que el empate parece un resultado justo para lo visto. La buena noticia es que continuamos líderes por desempate. La mala es que David acabó muy tocado y le debemos una alegría que esperamos poder brindarle a final del campeonato.
Tras el match nos disponíamos a buscar lugar donde comer. Pero queda claro que la experiencia demuestra que cuando vas sin destino apalabrado, acabas equivocando el sitio donde comes. La buena noticia es que el "presi" estará contento esta semana porque el gasto ha sido inusualmente bueno para la entidad. Preguntamos a los lugareños (jugadores del Santa Eugènia) por algún lugar y el sitio donde nos enviaron estaba cerrado. Monluis hizo buenas migas con una persona de la tercera edad que nos acompañó unos 100 metros mientras iba indicándole posibilidades culinarias, eso sí a un kilómetro de distancia por lo que llegamos a andar; y encima sólo veíamos bares, no restaurantes. La sensación que quedó es que el abuelo hacía muchos, muchísimos años que no iba a comer a algún buen restaurant de la zona porque no dió ni una.
Finalmente entramos en un restaurant que desde fuera ofrecía buenas perspectivas, pero que una vez dentro nos dimos cuenta del grave error cometido (cuanto te echamos de menos Ezequiel, nuestro gurú y guía gourmet). Comimos de menú (porque por no haber no había ni carta, mal presagio de entrada), que tampoco pasa nada, a no ser por el mal menú ofrecido. Primeras quejas de algunos jóvenes poco habituados a las verduras y mucho menos si te las cuelan en un canalón (sobre tres) que en teoría debía ser de carne. Y el arroz, buff, ya era de impresión, pero no por el sabor, sino por el crujido al "destruirlo" en la masticación con los dientes (no es que estuviera al dente, sencillamente estaba duro). La novedad en el arroz era que pusieron lima en lugar de limón para el que quisiera aderezarlo (por algo era catalano-brasileño el lugar). Y los huevos al plato parecían flotar en una piscina de aceite tapados por una capa tomatera y otra blanca que en teoría era mayonesa, aunque el sabor no indicaba eso; pero lo mejor eran unos langostinos puestos en círculo alrededor de una triste lechugita verde más sóla que la una (una salsita o algún acompañamiento lo hubiera agradecido la lechuga y algún paladar también. Los postres de impresión: cucurucho de dos sabores, natilla (al menos eso decían que era) y yogurt (blanco sin azucarar)
Las bebidas eran lo único racional porque iban enlatadas o embotelladas, y claro, no dependían del restaurant catalano-brasileño (o era un bar de comidas de mala muerte), sino de las empresas distribuidoras como la Coca-Cola (duro competidor le ha salido a Monluis ya que Erik se bebió hasta tres o era alguien que le iba amontonando las latas en su sitio?). El vino genial, eso sí con gaseosa porque ya el color era diferente. Gran vino de mesa. Tomamos cafés por cortesía y porque somos educados, pero un carajillo que te lo sirven frío, y no porque la cantidad de whiskie apague el calor del café, ya es un mal síntoma.
En fin, que decidimos desquitarnos futuramente del grave error cometido. Y eso que el buen humor no lo perdimos porque hubo pullas tanto en el restaurant (?) como en el paseo posterior para buscar los coches y de paso digestionar tal comilona de placer (?) que tuvimos. Sonaron frases de retos para hacer un torneo de catch a cuatro, eso sí con la viejas reglas de nuestras épocas (mate directo) y no andar con "tonterías" como las de los jóvenes de hoy en día que no dejan entrar en mate directo (mucho miedo). Ya surgieron algunas parejas: Jose y Erik, Paco y Eduard, Eric y Dani (o era Marc) y los Mon. Falta designar el día y esperar nuevos retadores. Será divertido después de más de 20 años sin jugar a esa modalidad.
El más contento Ricard ya que la targeta ni notó el paso por el "bar de comidas". Menos mal porque si encima de comer fatal nos meten un clavo monetario ...
7 comentarios:
¿Necesitais un delegado en el primer equipo? Me ofrezco como delegado para buscar restorant, bar o tasca cuando salgais por ahi.¡¡Como llenais el buche!!
No llenamos el buche, fomentamos las relaciones personales, jejeje; y si es alrededor de una buena mesa, pues mejor que mejor.
De todas formas, par ser delegado, si has de firmar con ese sobrenombre lo tenemos complicado. Nuestro delegado debe ser muy visible.
Y no se os ocurrio preguntarle a alguien del Santa Eugenia por un restaurante?
Ya les preguntamos y nos dijeron uno. El problema es que cuando llegamos estaba cerrado el restaurant y al pasar por delante del local del Santa Eugenia ya no quedaba nadie porque de hecho acabamos tarde.
Asi que nos tuvimos que fiar del abuelo que con buena fe nos quiso guiar.
Pero no pasa nada, hubo guasa en la comida que es lo que más nos divierte. El resto quedará como una anécdota en el futuro.
Eso del torneo de catch con reglas prehistoricas suena interesante si aceptais exjugadores y el dia me va bien me apunto
Supongo que no hay problema alguno en la participación de ex. De hecho cuando se hablo del tema sonó más como algo retador que de quien podia o no jugar, de eso no se dijo nada.
El día aún es un proyecto, veremos si el domingo que viene sacamos algo más claro sobre cuando y como.
De todas formas te hará falta un compañero.
Tranquilo que ya me buscare algun compañero adecuado
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